Hay momentos en la vida en los que extrañamos tanto a algunas personas, que quisieramos sacarlas de nuestros sueños y envolverlas en un abrazo.
Soñemos lo que deseamos soñar; vayamos a donde deseamos ir; seamos lo que deseamos ser, porque solamente tienes una vida y una oportunidad para hacer las cosas que deseas.
Tengamos la suficiente felicidad, que nos haga dulces; los suficientes tropiezos, que nos hagan fuertes; la suficiente tristeza, que nos haga humanos y la suficiente esperanza, que nos haga felices.
Siempre pongamonos en los zapatos de otras personas. Si sentimos que nos duele, probablemente le dolerá a esa persona también.
La mayoría de la gente feliz, no necesariamente tiene lo mejor de cada cosa; ellos solamente toman lo mejor de las cosas que aparecen a lo largo de su camino.
La felicidad existe para aquéllos que lloramos, aquéllos que nos duele, aquéllos que hemos buscado, aquéllos que hemos tropezado; porque solamente nosotros podemos apreciar la importancia de las personas que han tocado nuestras vidas.
La vida comienza con una sonrisa, crece con un beso y termina con una lágrima.
El futuro brillante estará basado, siempre, en un pasado olvidado; no podemos continuar con nuestra vida hasta que dejemoss escapar nuestros fracasos del pasado y los dolores del corazón.
Cuando nosotros nacimos estabamos llorando y todos alrededor nuestro estaban sonriendo.
Viva nuestra vida de manera que cuando muramos, seamos nosotros quienes estén sonriendo.
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