AMIGOS SIN ROSTRO. Reedicion

(A los amigos con los que chateamos por Internet)

Nosotros nos sentamos por horas, escribimos interminables momentos y miramos fijamente el monitor de nuestras computadoras. Todos nosotros podemos imaginar lo que esto puede significar. Con nuestros Mouse (ratones) viajamos por las páginas de Internet que mas nos atraen  a veces hasta perdidos como en un laberinto, buscando algo o a alguien como sí estuviéramos hipnotizados.

Nosotros chateamos unos con otros, compartimos nuestras penas, formamos pequeños grupos, creamos blogs y hasta peleamos con aquellos que no son de nuestro agrado. Esperamos por alguien que escriba nuestros nombres, en nuestro muro, queremos reconocimiento de personas que no conocemos  y ofrecemos lo mismo. Damos besos y abrazos y hasta en ocasiones coqueteamos (amor cibernético).

Por largos ratos chateamos profundamente y revelamos aquello que nos duele o que nos alegra. Nosotros logramos en ocasiones formar algunas amistades, ¿porqué?, no lo sabemos, algunas de ellas se marchitan, otras florecen y crecen.

¿Por qué en las pantallas podemos ser tan grandes y sinceros, diciendo nuestros secretos que nunca han sido revelados a personas que jamás en la vida hemos visto?

¿Por qué compartimos, nuestros pensamientos mas profundos con aquellos que no nos ven y piensan que somos ciegos?

La respuesta es muy sencilla, es tan clara y cristalina como el agua (dirían los americanos cristal clear). Todos tenemos problemas y necesitamos alguien a quien contárselos y que nos escuche (en este caso que lo lea), no podemos decírselos a la gente "real" por el miedo al que dirán, pero sin embargo a alguien le debemos contar, es una necesidad humana el compartir. Así que vamos a la computadora, nuestra gran amiga silenciosa, y hacia aquellos en quiénes confiamos aunque no les vemos el rostro.

Aunque pensemos que es algo fuera de lugar y poco loco, la verdad siempre prevalece, son amigos sin rostro, y con nombres algunas veces muy raros.... y que siempre están dispuestos a leer lo que tengamos que decir.