SOMOS ÚNICOS.

Desde el comienzo de la raza humana se estima que los seres humano deben sumar alrededor de 700.000.000.000, es decir setecientos mil millones de seres.

Nunca, durante los casi 100.000 años de evolución del homo sapiens sapiens, ha habido entre los setenta mil millones de seres humanos que han caminado sobre el planeta desde que este fue creado, un ser que haya sido exactamente igual a ti.

Nunca, hasta el fin del mundo, habrá otro igual a ti.

Somos una creación única en el mundo. Somos únicos en nuestra clase. Únicos entre los únicos.

Poseedores de cualidades en mente, habla, movimiento, apariencia y acciones que nunca tuvo otro ser que haya vivido, viva o vivirá.

¿Por qué nos valoramos en migajas cuando nuestro valor es más grande que la riqueza del más opulento rey que haya caminado por la faz de la Tierra?

Si nos concientizamos de lo únicos que somos, que nuestra estructura corporal y mental es una maravilla de la naturaleza, que somos una maravillosa obra del hacedor del universo, nos ayudaremos a descubrir cual explorador en inmensurable tesoro que somos todos y cada uno de nosotros, valoremos lo importante que es convivir entre nosotros y nosotros con nuestro entorno, como uno solo, como un mismo ser...