Nada más contradictorio que ser mujer…
Mujer que piensa con el corazón, actúa por la emoción y vence por el amor…
Que vive un millón de emociones en un solo día, y transmite cada una de ellas con una sola mirada…
Que vive buscando la perfección y vive tratando de buscar disculpas para los errores de aquellos a quienes ama…
Que hospeda en el vientre otras almas, da a luz y después queda ciega, delante de la belleza de los hijos que engendró…
Que da las alas y enseña a volar pero no quiere ver partir a los pájaros, aun sabiendo que no le pertenecen…
Que se arregla toda y perfuma la cama, aunque su amor no perciba más esos detalles…
Que como una hechicera transforma en luz y sonrisa los dolores que siente en el alma, sólo para que nadie lo note…
Y aún tiene fuerzas, para dar consuelo a quien se acerca a llorar sobre su hombro…
¡¡¡Feliz el hombre que, tan sólo por un día, sepa entender el alma de la mujer!!!
Es una lastima que la mayoría no profundiza en nuestras acciones que siempre son pensando en los demás y muchas veces nos olvidamos de nuestras propias necesidades para dar lo que necesita y piden cada uno de nuestros seres queridos por eso el hombre que llega a la profundidad siempre sentirá que es un bendecido contar con una mujer integra y amorosa capaz de proyectar a todos donde deben estar
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