viernes, 30 de diciembre de 2011

EL UNIVERSO VIVE EN NOSOTROS.


El mundo existe en nosotros; nosotros no existimos en el mundo. Éste es un concepto un poco difícil de entender, y podemos pasarnos toda la vida tratando de comprenderlo intelectualmente. Sin embargo, desde un punto de vista práctico, la próxima vez que miremos un árbol, o que miremos a otro ser, o que miremos cualquier cosa, simplemente digámonos a nosotros mismos: ese árbol existe en mí. Esas estrellas y galaxias, esta mesa y esta silla… todo existe en mí.


Si nos decimos esto a nosotros mismos, pronto empezamos a ver que tenemos conocimiento de ello. Si nos decimos a nosotros mismos que nosotros existimos en ustedes, los amaremos. Tarde o temprano, tendremos esa relación íntima con todo lo que existe.

Todo el universo está vivo. La Tierra, las estrellas, la Vía Láctea y otros sistemas galácticos son un organismo vivo. El universo es un gigantesco Ser vivo. Cuando tenemos un sentimiento de intimidad con este Ser, cuando nos enamoramos de todo lo que existe, el universo nos habla y nos revela sus secretos más íntimos.

1 comentario:

  1. SOMOS ENERGÍA, CONOCERLA ES CONOCERNOS

    La gran unificación, el sueño de Albert Einstein, nunca será posible sin incluir el estudio de la consciencia. Religión viene de religare (volver a unir), Yoga significa Unión, todas las religiones van detrás de ese «Todo es uno». Ciencia y religión búscan la unión, el todo, la consciencia de la luz. La energía es como el agua, toma la forma del recipiente que la contiene. Hasta no ser conscientes de la energía la seguiremos confundiendo con sus recipientes. Esos recipientes son nombres como: vacío, depresión, soledad, silencio, etc. Sin embargo, la energía es una espiral, un remolino que solo se puede sentir y disfrutar, cualquier nombre es solo un recipiente más.
    La ciencia ya está en sus fronteras, más allá de ellas se vislumbra la consciencia. Los científicos pronto tendrán que volcar sus investigaciones hacia adentro y aceptar que sin calibrar sus sentidos (naturales analizadores de frecuencias con los que decodifica, modifica y crea su realidad) sólo se podrán aproximar a la energía con un modelo racional y teórico de interpretación pero jamás podrá tener certeza sobre ella.

    utilizaremos el lenguaje de la física para ello porque son los físicos los que con más inspirada y ferviente devoción han consagrado su vida al estudio de la luz y a la veneración por el universo y las estrellas, por su gravedad y su unidad con lo terrenal y el micromundo de las partículas. Las fronteras entre ciencia y religión cada vez son más estrechas, finalmente todos somos devotos de la luz. Según Einstein para la luz que salió del big bang no ha pasado ni un segundo porque a la velocidad de la luz el tiempo no transcurre. Los fotones son eternos, pueden estar aquí y en otra galaxia a la vez, son luz. Dios también está en todas partes, es eterno y es la luz, según todas las religiones. Lo que más se parece a la definición de Dios es la luz. Todos somos devotos de la luz y de la energía y todos buscamos esa gran unificación con el todo.

    somos una preciosa particula de este universo llena de sabiduria y debemos reflejar esa luz interna en cada cosa que hagamos..... seamos la manifestacion de la glori de Dios y cuidemos nuestra herencia,, nuestra tierra

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