La alegría es vida que se expresa. El flujo libre de
energía de vida es lo que se denomina alegría. La esencia de la vida es la
Unidad, comunión con todo aquello que es. Eso
es la vida: unidad, que se expresa. La sensación de unidad es amor. Por lo
tanto, decimos que la esencia de la vida es el amor. La alegría es, pues, el amor que se expresa libremente.
Tu corazón es el pasillo entre tu alma y tu mente, es el
camino, la vía que los comunica. La alegría de nuestra alma debe pasar a través
de nuestro corazón, de otra forma, “ni siquiera podrá llegar a nuestra mente”.
Los sentimientos son el lenguaje del alma, es la manera que tiene de expresarse. Nuestros sentimientos se acumularán en nuestro corazón si tenemos la mente cerrada. Esa es la razón por la que, cuando nos sentimos muy tristes, muy tristes, decimos que nuestro corazón se está rompiendo, que es un corazón herido. Y es por eso que cuando nos sentimos muy, muy feliz, decimos que nuestro corazón rebosa al punto de explotar.
Abramos la mente, permitámonos expresar nuestros sentimientos, expulsarlos, exteriorizarlos y nuestro corazón ni se romperá ni explotará, sino que será un canal abierto de la energía vital que se encuentra en nuestra alma.
Cada vez que la expresión libre e ilimitada del amor y la vida, o sea, la experiencia de la unidad y comunión con todas las cosas y con cada ser sensible, se ve prohibida o limitada por cualquier circunstancia o condición, el alma, que es la alegría misma, no se expresa en su totalidad. Y la alegría que no se expresa en su totalidad se convierte y transforma en tristeza.
Aún percibimos las cosas como si estuvieran separadas. El calor y el frío no están separados, son extremos de la misma cosa. Nada lo está. No hay nada en el Universo que esté separado de otra cosa. El calor y el frío son, por lo tanto, la misma cosa en grados diversos, como lo es la luz y la oscuridad. Lo mismo sucede con la tristeza y la alegría.
RECUERDO UNA FRASE DEL LIBRO EL HOMBRE QUE CALCULABA DONDE DECÍA QUE DIOS ES LA UNIDAD, ES EL NÚMERO UNO, ES ÚNICO.
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