ESTAR SOLOS Y SENTIRSE SOLOS

Querer estar solos, no es lo mismo que sentirse solos.

Querer estar solos es una necesidad del alma, y no implica sentirse castigado. Sentirnos solos es el resultado de una pena oculta o un amor roto de una felicidad ajena que nos duele, de las cosas dulces que no saboreamos, por pensar en las cosas tristes.

Querer estar solos es contemplar la lluvia detrás de nuestra ventana, y sentir como caen las gotas una por una sin que nos importe que no haya nadie más a nuestro lado para verlo, nos tenemos a nosotros, disfrutamos el contacto con la naturaleza, y para nosotros es más que suficiente. Sentirnos solos es mirar a las parejas de enamorados cuando llueve, y cuestionarnos por enésima vez porque no tenemos a nadie al lado y amargarnos además porque no podemos salir porque esta lloviendo.

Querer estar solos es no ir al antro porque queremos pensar y decidir. Sentirnos solos es estar en el antro y sentir como si estuvieses sin nadie en un cuarto oscuro.

Querer estar solos es rechazar relaciones que no nos convienen porque sabemos que merecemos algo mejor. Sentirnos solos es estar en una relación que no nos conviene y seguir en ella porque pensamos que no encontraremos a nadie mejor.

Querer estar solos implica saber esperar a la persona y a las oportunidades correctas. Sentirnos solos es aventarnos de cabeza con alguien que a los demás les parece perfecto para ti, pero nosotros sentimos lo mismo estar con el que ver pasar al vendedor de helados.

Querer estar solos es estar en el lugar que queremos, aunque al resto no le haya parecido y por eso no hayamos querido ir. Sentirnos solos es dejarte arrastrar por la manada a un lugar que nosotros ni queríamos solos por sentirnos acompañados.

Querer estar solos es hacer respetar nuestras decisiones porque sabemos que nos harán felices. Sentirnos solos es terminar cediendo en todo aunque no nos guste.

Querer estar solos es escuchar el último CD de nuestro artista favorito y disfrutar las canciones al máximo aunque hablen de sólo de amores perdidos. Sentirnos solos es llorar a moco tendido por las canciones, porque te recuerdan a alguien que ni siquiera se acuerda de nosotros y ni nos quería.

Querer estar solos es aceptar que algo ya termino y es una decisión sin retorno. Sentirnos solos es aferrarnos a una persona que ya no quiere nada con nosotros para no sentirnos solos.

Querer estar solos es darle la oportunidad a los demás de querer permanecer o no a nuestro lado. Sentirnos solos es acosar a los demás para que se queden contigo.

Querer estar solos es mostrarnos tal y como somos. Sentirnos solos es ser quien no somos para agradar a otros, aunque terminemos sintiéndonos más solos.

Querer estar solos es ser selectivo con la gente a la que le damos nuestra amistad y confianza. Sentirnos solos es darle nuestra amistad a cualquiera que nos demuestre simpatía.

Querer estar solos es saber diferenciar entre un pretendiente y un amigo. Sentirnos solos es creer que todos los que tienen atenciones quieren algo más con nosotros.

Querer estar solos es valorar cada cosa que nos rodea. Sentirnos solos es mirar el mundo gris y sin fondo.

Querer estar solos es darle su justa medida a las cosas. Sentirnos solos es hacer una tragedia griega por cosas que no vienen al caso o sentirnos ofendidos por algo que no era tal vez ni una ofensa.

Querer estar solos implica tener tiempo para nosotros y nuestras metas. Sentirnos solos es sacrificar todo por alguien que tal vez ni siquiera nos lo agradezca.

Querer estar solos es ver a la soledad como tu mejor amiga cuando quieres pensar. Sentirnos solos es percibir la soledad como castigo.

Querer estar solos ayuda a tu equilibrio emocional. Sentirnos solos basa nuestro bienestar en factores externos.

Querer estar solos es perdonar solo cuando se debe. Sentirnos solos es disculpar hasta la máxima ofensa.

Querer estar solos tiene solución, es un período que se cierra cuando queremos… Sentirse solos es un sentimiento eterno.....que nos lleva a un camino del que no hay retorno... ni hay final.

AMOR DE LEJOS…

A lo largo de mi vida me he visto obligado a estar distanciado de aquellas personas que amo, mi pareja, mis hijos, mi familia, mis amigos… todo por que mi profesión, esa que decidí seguir por amor, me ha llevado a eso.

¿Saben? Hace unos instantes me puse a buscar un pensamiento para dedicárselo a todas aquellas personas que están enamoradas pero que por alguna razón no pueden estar junto al ser que aman, familiares, amigos, hijos, pareja. En especial se lo dedico a mi familia.

Jamás dejen de luchar por las personas que realmente aman, no permitan que la distancia deteriore el amor que ambos sienten, disfruten de cada instante aunque no estén cerca, pero siempre que se vean sólo mírense a los ojos y disfruten del poder abrazar y sentir a la persona que aman.

No hagan caso de ese dicho que dice “amor de lejos es amor de pendejos”, si realmente se aman la distancia no será ningún factor que impida esa unión. Pero si sólo es una ilusión con el tiempo la unión sé ira deteriorando hasta quitar el encanto que se en un inicio se formó.

El amor es uno de los sentimientos más maravillosos que brilla en nuestro corazón, y recuerden que hasta la pareja más feliz tiene problemas, pero esos problemas son la base de la formación de nuestro amor, y es una unión que con el tiempo se convertirá en algo más fuerte que el acero reforzado y mucho mas complejo que la estructura propia de nuestra hermosa galaxia.

Espero que les agrade el pensamiento:

“Luchen por el amor y nunca se den por vencidos en sus sueños y metas, nunca olviden sonreír que las sonrisas son el lenguaje del corazón y una sonrisa puede cambiar la carita de un ser que lleva una tristeza dentro de su corazón”.  Shoshan.

Hoy quiero que sepan cuánto los quiero y lo mucho que significan para mí.

En la vida hay muchos caminos que se deben seguir, unos nos llevan a la tristeza y otros nos conducen a infinita felicidad. Fíjense que al igual que nos llevan por distintas direcciones, uno me llevó a conocerlos, alguien que me llena de dicha y amor en cada momento de mi vida, alguien que me enseñó a descubrir lo que significa el amor.

Les agradezco cada momento de felicidad que me han brindado, son unos seres maravillosos, los quiero muchísimo, nunca olviden eso, y aunque me encuentro en otro sitio, la distancia no será ningún factor que impida que yo los quiera cada día más y más, con una infinita entrega porque mi corazón les pertenece y los necesita cada día más.

-Porque- Son muy importantes en mi vida, y por ningún motivo los perderé fácilmente; aunque si deciden que no estemos juntos, los dejaré partir porque realmente los quiero y sólo quiero verlos felices.

Son el oxigeno de mis venas, son la sangre que permite que palpite mi corazón, y si nuestra unión se quebrantara mi corazón dejaría de latir y moriría poco a poco, pero si mis ojos pueden verlos sonreír aunque no estemos juntos, seré fuerte porque los quiero, y aunque me duela me dará gusto saber que son completamente feliz.

-Porque- Son todo mi universo, son todo mi existir, son mi lava ardiente que me permite sobrevivir. Cuando no estoy con ustedes nuestro camino se vuelve triste por la distancia que nos separa; créanme que mis días son la distancia nos separa; créanme que mis días son eternos sin su presencia. Pero cuando estamos juntos quisiera parar el tiempo para que ese momento nunca se termine y así contemplar sus miradas, sus rostros, todo su ser, y mantener esa imagen junto a mí hasta el día de nuestro próximo encuentro.

¡Los quiero muchísimo!

Para mí esta unión es excepcional y lo mejor que me ha pasado.

"TEMÍA PERO AHORA NO" Nota Reeditada.

Sábado, 09 de octubre de 2010 a las 19:14

Temía estar solo, hasta que aprendí a quererme a mi mismo.

Temía fracasar, hasta que me di cuenta que únicamente fracaso si no lo intento.

Temía lo que la gente opinara de mí, hasta que me di cuenta de que de todos modos opinarían de mi.

Temía... me rechazaran, hasta que entendí que debía tener fe en mi mismo.

Temía al dolor, hasta que aprendí que éste es necesario para crecer.

Temía a la verdad, hasta que descubrí la fealdad de las mentiras.

Temía a la muerte, hasta que aprendí que no es el final, sino más bien un comienzo.

Temía el odio, hasta que me di cuenta que no es otra cosa más que Ignorancia.

Temía al ridículo, hasta que aprendí a reírme de mi mismo.

Temía hacerme viejo, hasta que comprendí que ganaba sabiduría día a día.

Temía al pasado, hasta que comprendí que no podía herirme más.

Temía a la oscuridad, hasta que vi la belleza de la luz de una estrella.

TEMÍA PERO AHORA NO, DIOS LOS COLME DE GRACIAS Y BENDICIONES....